Reclusión inconsistente

El inconsistente no está, se fue. Se alquiló una quinta en Tortuguitas con Merengadas, su marido (+) y Demóstenes, y desapareció.

Cura de sueño y stress, que desencadenaron algunos episodios de hipertensión de fin de ciclo, fueron los motivos para la desaparición de este autor, que no tuvo un buen año, ni en lo personal, ni en lo familiar, aunque laboralmente no hay quejas. ¿Cuánta gente puede decir que hace lo que le gusta aunque el desgaste sea demoledor?

Algunos testigos dijeron que lo vieron tranquilo entre tanto verde. Otros se animaron a enumerar algunas de sus actividades:

- Duerme más de 10 horas diarias y nunca aparece por la cocina en busca de su desayuno antes de las 11am.

- Se mostró como un nadador eficaz. Práctica algunas horas de croll y pecho con cierta destreza, aunque es un verdadero torpe con la mariposa y la espalda. También le gusta bucear como el Hombre de la Atlántida y puede hacer dos largos por debajo del agua.

- Le gusta leer en la hamaca paraguaya de Merengadas que está ubicada justo debajo de un frondoso árbol. Puede pasar horas allí, y cuando el sueño lo invade construye una suerte de capullo –una momia inca para algunos– y procede a entregarse a los brazos de Morfeo por horas.

- Está comiendo demasiado, muchos asados y pizzas a la parrilla. Sigue siendo un devoto del buen vino.

- Persiste en el nulo interés por aprender a hacer un asado y no sabe cocinar absolutamente nada, pero es muy habilidoso en el lavado de platos.

- Perdió todos los partidos de tenis que jugó, aunque Demóstenes le ha estado brindando algunos consejos con lo que logró mejorar su revés. Ya no pierde 6-1, 6-1, ahora cae en 6-3, 6-2. Estamos mal, pero vamos bien (¿quién dijo eso?).

- Todavía no jugó al fútbol, aunque estuvo peloteando con su cuñado el domingo pasado.

- Se divirtió a morir con su sobrino de tres años durante una visita dominguera, aunque admite que el pibe revolucionó todo. Sencillamente no para.

- Ya vio 10 veces en DVD las películas House of Mouse de Mickey, Madagascar y La vida salvaje, con los que Merengadas entretiene a sus mellizos, de los cuales El inconsistente y Demóstenes son padrinos.

- También vio Psicosis, Intriga internacional y Para atrapar al ladrón de Alfred Hitchcock, Tiburón de Steven Spielberg. El Imperio contraataca de Irvin Kershner y Nosferatu de Friedrich Wilhelm Murnau, algunas más de una vez…

- Festejó su cumpleaños 38 junto con Demóstenes. Como todos los años, hubo 30 invitados de su colega, un puñado de amigos en común y sus propios invitados faltaron a la cita. Sin embargo, recibió muchos llamados, mails, mensajes de Facebook, etc, etc, etc.

- El descanso y la buena vida hicieron que varias de sus funciones vitales vuelvan a funcionar correctamente, entre ellas, el aparato digestivo.

- También regresó el deseo sexual. Anduvo comprando provisiones en Las Palmas del Pilar y no paró de ver culos de jovencitas, pero como siempre, tuvo mejor llegada con las no jovencitas de entre 35 y 40.

- No deja de escuchar Amy Winehouse y Al Green en el MP3. También Led Zeppelin, Bob Marley, Doors, Michael Jackson y los Rolling Stones.

- Se dejó crecer la barba, y le quedó toda la pera blanca. No le gustó la imagen: parece Charly García en sus épocas de chiva bicolor. Ya se afeitó.

- Se baña poco y nada. Y le gusta esa imagen.

No lo busquen ni pregunten por él. Simplemente no está. Pero tranquilos: El inconsistente vuelve. ¿Cuándo? Eso es todavía una incógnita.

Sí dejó dicho lo siguiente para todos sus lectores: “Deseo que en el 2009 hagan lo que les venga en gana y, en la medida de lo posible, lo necesario para ser felices, si es que esto es una meta para ustedes. Feliz año para todos”.

¿Y vos, estás recluido en algún lado?