La belleza de Toro salvaje de Martin Scorsese
Quiero hablarles de una de mis películas preferidas. Se llama Toro salvaje (Raging Bull) y fue dirigida por Martin Scorsese en 1980. Es el mismo realizador que estuvo al frente de Taxi Driver, Calles salvajes (Mean Streets), Después de hora (After Hours) y tantas otras.
Soy de los que creen que los títulos en el comienzo de algunas películas son verdaderas obras de arte y que te predisponen a sentir las emociones que depara el filme. Toro salvaje es el mejor ejemplo de esta categoría de cintas.
La película arranca desde un fundido negro con el intermezzo de la ópera Cavalleria Rusticana (Caballerosidad rústica en español), del compositor italiano Pietro Mascagni, una pieza conmovedora que te estruja el corazón, por su belleza, su melancolía y su tristeza.
Ahí aparece la figura de Jake LaMotta (Robert de Niro) envuelto en una tenue bruma mientras lanza golpes en un ring de boxeo de proporciones desmesuradas. El púgil baila como si se tratara de un ballet que presagia el drama inminente, mientras que de fondo suena la ópera.
Creo que es una de las escenas más hermosas de la historia del cine. Es maravillosa la conjunción de las imágenes en blanco y negro, con la música y los movimientos en cámara lenta del boxeador. Les juro que puede sentirse la soledad del hombre que está a punto de enfrentar su destino.
Cada vez que veo esta película (hoy por ejemplo) siento deseos de poder comunicarme con Scorsese para decirle todo lo que siento por su arte. Decirle que conecto con las cosas que quiere expresar, con su mundo, y confesarle que él ya es parte de mi vida y lo será para siempre.
Que sería del mundo sin Martin Scorsese. Por favor.
Acá tenés el comienzo de la película. Disfrutalo y observá el trabajo de un genio
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1 comentario:
es verdad es muy EMOCIONANTE!!!
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